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El error del árbitro que casi cambió la historia de Joel Álvarez

El error del árbitro que casi cambió la historia de Joel Álvarez El error del árbitro que casi cambió la historia de Joel Álvarez ¡Atención, fans de las MMA! El...






El error del árbitro que casi cambió la historia de Joel Álvarez

El error del árbitro que casi cambió la historia de Joel Álvarez

¡Atención, fans de las MMA! El pasado domingo, el octágono de Río de Janeiro vibró con una actuación espectacular que casi se convierte en polémica histórica. Nuestro guerrero asturiano, Joel Álvarez, el apodado ‘El Fenómeno’, se subió a la jaula para enfrentarse a Vicente Luque, un peso pesado con dieciséis victorias en la UFC a sus espaldas. Y lo que vimos fue una clase magistral de dominación, una victoria tan contundente que dejó a todos con la boca abierta, aunque con un pequeño asterisco cortesía de un arbitraje que pudo haber cambiado el desenlace antes de tiempo.

Joel no dejó lugar a dudas, mostrando una superioridad aplastante durante los tres asaltos. Los jueces lo tuvieron clarísimo y le otorgaron una decisión unánime con un triple 30-26. ¡Una paliza en toda regla! Pero aquí viene el giro dramático: si el árbitro hubiera actuado como debía, la pelea habría terminado mucho antes, lo que habría significado otra victoria por finalización para Álvarez. Esta es la primera vez que ‘El Fenómeno’ gana por decisión, ya que sus anteriores veintidós victorias profesionales habían llegado siempre antes de que sonara la campana final. Un dato que, sin duda, le pone un toque más picante a su ya impresionante historial.

Más allá de la controversia, esta pelea marca un antes y un después para el luchador español. Su transición del peso ligero (70.3 kilos) al wélter (77.1 kilos) está resultando todo un acierto, y su horizonte en la UFC luce más prometedor que nunca. Tras bajarse del octágono, Joel nos ha regalado sus primeras impresiones sobre esta nueva etapa y sobre un combate que no dejó indiferente a nadie.

Primeras Impresiones Post-Combate: «Vicente es una piedra»

Cuando le preguntamos cómo se sentía después de esta hazaña, Joel no se anduvo con rodeos. «Me he encontrado muy bien, muy a gusto», nos confesó con esa humildad que le caracteriza. Sin embargo, no pudo evitar mostrar una pizca de frustración por no haber conseguido la finalización. «He intentado por activa y por pasiva finalizar, pero Vicente es una piedra«, afirmó, reconociendo la resistencia de su oponente. Es curioso, pero en lugar de celebrar a lo grande una victoria tan significativa contra un veterano de la talla de Luque, Joel se disculpaba por no haber logrado el KO. Una mentalidad de campeón que busca siempre el diez, aunque eso signifique dejar con ganas al público de verle levantar los brazos antes de tiempo.

«He tocado con los dedos la finalización en varias ocasiones, pero no ha podido ser, es un veterano de guerra», explicó. A pesar de esto, se mostró muy satisfecho con la puntuación: «Ha sido un 30-26, una victoria muy clara. Estoy contento porque he hecho minutos de jaula, que lo necesitaba en esta nueva división, comprobar cómo son de fuertes». Esta experiencia de quince minutos en el octágono, enfrentándose a un rival tan sólido, le ha servido para medir sus fuerzas en la nueva categoría y entender dónde tiene que ajustar su estrategia.

La Transición al Peso Wélter: Un Desafío Superado

El cambio de categoría siempre genera incertidumbre, pero Joel parece haberlo tomado con una confianza admirable. «Vicente era muy fuerte, muy duro, pero me he notado muy bien, es mi división», aseguró. Aunque sabe que hay margen de mejora, tiene claro que este es su lugar. «Tengo que mejorar muchas cosas, pero puedo darle grandes alegrías a los aficionados españoles en esta categoría», prometió. Y con lo visto, ¡no nos cabe la menor duda!

Esta victoria, aunque no haya sido por finalización, es sumamente valiosa para Álvarez. «Al final son veintitrés victorias que tengo, todas las anteriores finalizadas y esta no. Piensas si tenía que haberme volcado más en el triángulo invertido que tenía, haber utilizado otro tipo de golpeo sobre la lona…», reflexionó el luchador, demostrando su constante búsqueda de la perfección. Pero al final, la conclusión es clara: «Hemos ganado que es lo importante y estoy muy contento con ello».

El Punto de la Controversia: El Error Arbitral que Pudo Ser KO

La pelea tuvo un momento que generó bastante debate. En el primer asalto, hubo una detención por parte del árbitro debido a un supuesto piquete de ojo sobre Vicente Luque. Lo que parecía un golpe ilegal, en realidad era un impacto con el puño cerrado. «Sí, de hecho, se ve claramente en la repetición que es con la mano cerrada, le conecté en el ojo, no buscaba que fuera un KO, pero si hay esa parada… Bueno, no pasa nada, hubiese molado porque hubiera sido otro KO, pero me permitió ganar minutos encima de la jaula», explicó Joel.

Pero la cosa no acaba ahí. Las repeticiones mostraron que el árbitro incluso hizo un gesto que indicaba el final de la pelea, lo que de haberse confirmado, habría sido una victoria por KO técnico para Álvarez. «Eso es», afirmó el asturiano, «debería haber sido KO técnico. Pero bueno, ese primer asalto me ayudó para coger el ritmo, distancia y ‘timing’ de la pelea, sabía que lo había ganado». Esos minutos extra en la jaula, aunque fruto de un error, le sirvieron para aplicar su estrategia a la perfección. «En nuestras anotaciones teníamos apuntado que había que dar una clase maestra de boxeo y trabajamos muy bien ese aspecto», añadió.

Estrategias y Momentos Clave en el Octágono

La pelea se desarrolló con momentos inesperados. Luque, ante la presión de Joel, recurrió a la lucha cuerpo a cuerpo, algo que no estaba en los planes iniciales del equipo de Álvarez. «Sí, me sorprendió porque fue a la lucha las dos veces, pero defendí bien la lucha y caí por encima para asegurar la victoria», comentó el español. Le obligaron a Luque a cambiar su plan de ataque, y Joel no solo pudo defenderse, sino también asegurar una posición dominante. «Le obligamos a ir a luchar y es algo que me hizo ilusión», reconoció.

En el tercer round, Álvarez consiguió encajar un triángulo invertido, una posición de sometimiento que parecía definitiva. La pregunta era obvia: ¿por qué no lo finalizó? «Realmente llegué a encajar el triángulo invertido y lo tenía bien pillado», reveló Joel, «pensé que si quería finalizar y estirarlo, tenía que tirarme hacia un lado, pero Enrique (uno de sus entrenadores) me gritó que quedaban dos minutos, que eran muchos si no lo conseguía finalizar, y mi patrón (Borja Álvarez) me dijo que aguantara en esa posición». La inteligencia táctica primó. «Me quedé con las ganas porque si salía habría sido muy bueno finalizar con un triángulo invertido. Pero aseguramos la victoria que era lo importante, hay que ser inteligentes», concluyó.

En cuanto al poder de pegada en el peso wélter, Joel se mostró tranquilo. «Bien, bien, pega muy duro, me ha tocado varias veces, pero tengo mucha quijada, encajo bien los golpes y lo llevo bien. No llevo una carrera muy sufrida», aseguró, demostrando la dureza y la capacidad de resistencia del asturiano.

Un Futuro Brillante y el Respeto del Rival

Tras la batalla, un gesto de gran deportividad: Joel y Vicente Luque se sentaron juntos en el octágono, compartiendo un momento de respeto mutuo. Luque mismo le confesó a Joel que le había «pasado por encima» y le pidió consejos. «Yo le decía que era al revés», comentó Joel, «me dijo que quería hablar conmigo y le comenté que me gustaría pasarme algún día a entrenar con ellos en el gimnasio Kill Cliff». Un bonito momento que resume el espíritu de las artes marciales mixtas. «Es un salto generacional, yo crecí viendo pelear a Vicente Luque y es uno de mis luchadores favoritos y de mi hermano también. Me ha gustado mucho compartir la jaula con él», añadió Joel.

Esta victoria catapulta a Joel Álvarez hacia la élite de la UFC, acercándole al top 15. Sobre su próximo rival, ‘El Fenómeno’ se muestra paciente. «No lo sé, lo que mande la empresa», afirmó. Aunque tiene opciones interesantes en el horizonte. «En Qatar hay un evento el 22 de noviembre, antes de que nazca mi hijo en diciembre, puedo coger algún reemplazo si se cae alguno de los participantes del combate coestelar (Ian Garry contra Belal Muhammad), pero si no se diese, pues apuntaría ya más para marzo», explicó.

Su objetivo es asentarse bien en la categoría wélter y seguir ajustando su físico. «Quiero asentarme más en el wélter, ajustar más el rebote tras el recorte de peso, he rebotado hasta las 187 libras (84.8 kilos), no soy un peso wélter de los grandes, quiero hacerme un poco más grande. Pero me he notado muy rápido, eso sí, me ha dado ese punto de velocidad», finalizó Joel, entusiasmado con su progreso.

Para cerrar, Joel Álvarez quiso mandar un agradecimiento a sus fans, a su equipo, a su familia y a todos los que le apoyan en esta increíble aventura: «Quería darle las gracias a toda la afición, que son los mejores. También a mi equipo, el Centro Deportivo Tíbet de Gijón, el mejor gimnasio que hay, a mi familia, a mi mujer y a mi hija. Y a vosotros, a los seguidores del Ejército de Pancho Villa, misión cumplida en Río de Janeiro».

Un triunfo que, a pesar de la controversia arbitral, afianza a Joel Álvarez como una de las grandes promesas de la UFC y que promete muchas más alegrías para el deporte español. ¡El Fenómeno está aquí para quedarse!

Fuente original de la información: ABC – Álvaro Colmenero

Créditos de la imagen: UFC

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