El turbio secreto que persigue a Evo Morales desde 2015
¡Prepárense, amantes de las intrigas y los giros inesperados! En un mundo donde la política y las historias personales pueden entrelazarse de las maneras más sorprendentes, Bolivia nos trae un nuevo capítulo que seguramente dará mucho de qué hablar. El expresidente Evo Morales Ayma se encuentra nuevamente en el ojo del huracán, enfrentando un turbulento caso legal que lo lleva al centro de la controversia. La Fiscalía del país ha lanzado una acusación formal por un supuesto crimen grave, y la historia es tan compleja que promete mantenernos pegados a la pantalla.
La Acusación que Sacude a Bolivia
La noticia saltó a la luz con la presentación de una acusación formal contra Evo Morales Ayma por el, nada menos, que presunto delito de trata y tráfico de personas agravado. Este giro dramático pone al exmandatario en una posición legal delicada y reabre debates sobre su figura pública. Lo más impactante es que la investigación gira en torno a una supuesta relación que Morales habría tenido con una adolescente en 2015, cuando se encontraba en el pináculo de su poder presidencial.
Este proceso judicial no solo involucra a Morales; la acusación se extiende también a una familiar de la presunta víctima, señalándola por su presunto consentimiento y participación en los hechos. Esto complica aún más el panorama y añade capas de intriga a un caso ya de por sí cargado de implicaciones. Estamos hablando de una situación que sacude los cimientos de la esfera política boliviana y pone en tela de juicio a una de sus figuras más emblemáticas.
Un Pasado que Regresa al Presente
Si bien la denuncia formal llegó en 2024, los eventos que se investigan se remontan a 2015. La Fiscalía de Tarija fue la encargada de iniciar esta investigación por trata de personas con un agravante, un tipo de delito que acarrea penas severas. Las leyes bolivianas establecen condenas de entre 8 y 15 años de prisión para este crimen, que pueden extenderse hasta 20 años si la víctima es menor de edad. Estas cifras nos dan una idea de la gravedad de la situación y la seriedad con la que las autoridades están tomando este caso.
La investigación se ha sostenido en una base sólida de pruebas y elementos recopilados meticulosamente. Hablamos de testimonios clave, informes técnicos detallados y registros civiles que, según la fiscal departamental Sandra Gutiérrez, fueron suficientes para respaldar la acusación formal. Con esto, se busca que el caso avance a un tribunal para la apertura de un juicio oral, donde se expondrán todos los pormenores de esta enrevesada trama.
Detalles Escalofriantes y la Orden de Captura
El expediente judicial detalla que Evo Morales habría mantenido una relación sentimental con una adolescente en la ciudad de Yacuiba, en el sur del país, justo durante el que fue su tercer mandato presidencial. Un dato particularmente perturbador que emerge de la investigación preliminar es que la joven habría quedado embarazada a los 15 años. Esta revelación añade una dimensión aún más sombría a las acusaciones y subraya la delicadeza del caso.
Un Rebelde en el Punto de Mira
La situación legal de Morales se complicó aún más el 17 de enero de 2025, cuando el juez de Instrucción Penal, Anticorrupción y Contra la Violencia hacia la Mujer Quinto de Tarija, Nelson Alberto Rocabado, lo declaró en rebeldía. Esta decisión se tomó debido a la insistente inasistencia del exmandatario a las citaciones judiciales, lo que llevó a la emisión de una orden de aprehensión en su contra. Esta medida sigue vigente hasta el día de hoy.
El presidente del Tribunal Supremo de Justicia, Ricardo Torres Echalar, ha recordado que la ejecución de esta orden recae en la Policía Boliviana. Sin embargo, su cumplimiento se ha topado con un obstáculo significativo: Morales reside en la región cocalera del Chapare. Este lugar, conocido como su bastión político, le ofrece una estructura de protección y un sólido apoyo social que dificultan enormemente cualquier intento de aprehensión. La condición de «rebelde» tiene importantes implicaciones legales; mientras no se cumpla la orden o el acusado no se presente voluntariamente, el juicio oral no puede dar inicio. Morales, por su parte, ha dejado claro que no piensa “entregarse”, añadiendo tensión al ya complejo escenario.
Movimientos Políticos y Despidos Inesperados
Tras la acusación formal, se abre un periodo crucial de control procesal, donde el juez deberá evaluar las pruebas de cargo y descargo antes de emitir el Auto de Apertura de Juicio. Es en esta fase cuando el caso se hará completamente público, y las audiencias orales serán programadas, prometiendo un desarrollo con gran expectativa. Sin embargo, la historia tomó un giro inesperado que añade más sombras a este entramado.
En un movimiento que sorprendió a muchos, la fiscal Sandra Gutiérrez, quien presentó la acusación contra Morales, fue destituida de su cargo apenas unas horas después de realizar este importante anuncio. El fiscal general del Estado, Róger Mariaca, oficializó su relevo inmediato. Aunque Gutiérrez aseguró que su salida no afectará la continuidad del caso y solicitó un seguimiento ciudadano y mediático, la coincidencia de los hechos ha generado fuertes cuestionamientos y repercusiones políticas.
Montaje Político y Refugio en Argentina
Desde su «búnker» en el Chapare, Evo Morales ha reaccionado vehementemente, rechazando de plano las acusaciones y calificándolas de un “montaje político”. Según su versión, este proceso es una maniobra orquestada por el Gobierno de Luis Arce, con quien mantiene una profunda y abierta disputa por el control del Movimiento al Socialismo (MAS). El exmandatario considera que el objetivo principal es inhabilitarlo políticamente y minar su liderazgo, describiendo las investigaciones como un intento de “destrucción política” directamente desde el poder.
Esta confrontación entre Morales y Arce se ha intensificado notablemente en los últimos dos años, resultando en una fractura interna del MAS y la aparición de dos facciones: el «arcismo», leal al actual presidente, y el «evismo», que sigue fiel al expresidente. Mientras tanto, la presunta víctima y su madre han encontrado refugio en Argentina, donde se les concedió asilo humanitario el 22 de agosto de 2025. En su solicitud, ambas explicaron haber sufrido presiones y amenazas después de que se divulgara que el padre de la menor podría ser Evo Morales. La madre relató haber sido advertida para que no hiciera público el vínculo, lo que las llevó a temer por la seguridad de la joven y a buscar protección internacional. Este drama humano añade una capa de urgencia y complejidad a un caso que promete seguir desvelando impactantes detalles.
Fuente original de la información: ABC –
Créditos de la imagen: efe