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La razón por la que el enemigo de Topuria podría saltarse la fila

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La razón por la que el enemigo de Topuria podría saltarse la fila

La razón por la que el enemigo de Topuria podría saltarse la fila

En el vertiginoso mundo de las artes marciales mixtas, el camino hacia el cinturón de campeón suele ser una escalera empinada y llena de rivales de primer nivel. Pero, ¿y si te dijéramos que a veces una buena historia de rencor y rivalidad puede funcionar como un ascensor directo a la cima? Abróchate el cinturón, porque eso es exactamente lo que podría pasar entre el flamante campeón del peso ligero, Ilia «El Matador» Topuria, y su archienemigo declarado, el carismático y polémico Paddy «The Baddy» Pimblett.

El peleador de Liverpool se encuentra cómodamente instalado en el puesto número nueve del ranking. En teoría, esto lo deja a varios combates de distancia de una oportunidad titular. Sin embargo, Pimblett tiene un as bajo la manga que vale más que cualquier clasificación: una historia de enemistad personal con el campeón que podría convertir su enfrentamiento en uno de los eventos más esperados y lucrativos del año.

El Negocio del Espectáculo: Más Allá del Deporte

Para entender por qué esta pelea es una posibilidad real, hay que mirar más allá del octágono. La UFC, liderada por Dana White, no es solo la organización de MMA más grande del mundo; es una máquina de entretenimiento colosal. Y en el negocio del entretenimiento, las narrativas potentes venden. Las rivalidades personales, cargadas de tensión y declaraciones explosivas, son el combustible que enciende el interés del público y dispara las ventas de pago por visión.

Piensa en combates legendarios como el de Khabib Nurmagomedov contra Conor McGregor o la saga entre Jon Jones y Daniel Cormier. Esas peleas no fueron masivas solo por la calidad de los atletas, sino por toda la intrahistoria que las rodeaba. El odio palpable, los encontronazos en conferencias de prensa y las pullas constantes crearon una atmósfera eléctrica que trascendió el deporte. Y precisamente ese tipo de energía es la que desprenden Topuria y Pimblett cada vez que se cruzan.

Crónica de una Enemistad Anunciada

La mala sangre entre el hispanogeorgiano y el inglés no es una estrategia de marketing reciente. Sus problemas se remontan a marzo de 2022, cuando protagonizaron un tenso encontronazo en el hotel de concentración previo a un evento en Londres. Hubo empujones, insultos y hasta un botellazo de gel hidroalcohólico lanzado por Topuria. La mecha se encendió y desde entonces no ha hecho más que arder con más fuerza.

La tensión alcanzó su punto álgido en la conferencia de prensa del UFC 282. Aunque ambos peleaban en eventos diferentes esa noche, su riña personal se robó por completo el show, opacando a los protagonistas de la cartelera principal. En aquel momento, una barrera parecía insalvable: competían en divisiones de peso distintas. Pero el ascenso meteórico de Topuria y su coronación en el peso ligero (155 libras) ha cambiado las reglas del juego. La pelea, que antes era una fantasía para los fans, ahora es una posibilidad real y tangible.

«The Baddy» Llama a la Puerta del Campeón

Paddy Pimblett no es de los que se quedan callados. Consciente del potencial de este enfrentamiento, ya ha comenzado su campaña para hacerlo realidad. «Ahora que Jon Jones está retirado, creo que la pelea más importante que puede organizar la UFC es la mía contra Ilia», declaró recientemente el de Liverpool, mostrando una confianza arrolladora. «No me sorprendería que consiguiera el cinturón en 6 o 12 meses», añadió.

Su audacia llegó a tal punto que, tras la victoria de Topuria por el título, Pimblett no dudó en saltar al octágono para un careo improvisado. Aunque más tarde el propio Dana White aclaró que no estaba planeado y que era pronto para hablar de rivales, el mensaje quedó claro: «The Baddy» quiere a «El Matador». Y el interés del público respalda su petición. La historia está escrita y lista para ser vendida.

Los Obstáculos en el Camino

A pesar de todo el revuelo, el ranking sigue siendo un factor importante. Luchadores como Justin Gaethje y Arman Tsarukyan están por delante en la fila y también reclaman su oportunidad. Pimblett, fiel a su estilo, ya ha opinado sobre ellos. «Arman es un muy buen peleador, pero a nadie le importa», comentó sin tapujos. «Todos saben que Justin Gaethje es una maldita bestia y una leyenda… Así que me encantaría pelear con otra leyenda, Justin Gaethje».

Estas declaraciones demuestran que Pimblett entiende perfectamente el juego. Sabe que pelear contra una «leyenda» como Gaethje también es un gran negocio y una forma de legitimar su ascenso. El propio Topuria ha admitido que la pelea contra Pimblett es una opción, aunque su posición en el ranking podría obligar al inglés a un combate previo. La gran pregunta es: ¿se arriesgará la UFC a que Pimblett pierda y se desvanezca la narrativa, o harán una excepción y nos darán el combate que la enemistad demanda? El futuro del cinturón del peso ligero está en el aire, pero una cosa es segura: a pesar de su número en la clasificación, nunca hay que subestimar el poder de una buena historia y un enemigo carismático.

Fuente original de la información: ABC –

Créditos de la imagen: ufc

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