Los dos datos del Sevilla que preocupan a Almeyda
Los dos datos del Sevilla que preocupan a Almeyda
¡Atención, fanaticada del fútbol! El ambiente en Nervión está cargado de preocupación después de la reciente derrota del Sevilla en el Metropolitano. Los pupilos de Matías Almeyda cayeron 3-0 ante el Atlético de Madrid, un resultado que, si bien puede parecer un tropiezo más en la liga, ha encendido las alarmas por dos estadísticas que no pueden pasar desapercibidas. La situación es compleja y los errores individuales jugaron un papel crucial, facilitando el camino a los colchoneros y dejando al equipo sevillista con las manos vacías en la capital.
Esta derrota no es un hecho aislado. El Sevilla atraviesa un momento delicado, acumulando ya tres derrotas consecutivas. Antes de caer frente al Atlético, el equipo también sucumbió ante el Mallorca y la Real Sociedad, dibujando una racha que inquieta a la afición y al propio cuerpo técnico. La presión aumenta y las miradas se dirigen hacia la capacidad del equipo para revertir esta dinámica negativa.
Racha negativa y goleadas: Un patrón preocupante
La goleada sufrida en Madrid ha sido un golpe duro, no solo por el resultado en sí, sino porque expone un patrón que se viene repitiendo a lo largo de la temporada. No es la primera vez que el Sevilla encaja tres goles en un partido, y eso empieza a ser un problema serio que Matías Almeyda debe abordar con urgencia. Analicemos un poco más de cerca estos números y lo que implican para el presente y futuro del equipo.
Tres goles encajados: Una constante dolorosa
Si bien el 3-0 ante el Atlético de Madrid fue contundente, la defensa sevillista ya ha tenido noches complicadas. Recordemos la jornada inaugural, donde el Athletic Club les anotó tres goles en un partido que terminó 3-2. Luego, frente al Mallorca, se repitió la historia con un 1-3 en contra. Esta recurrencia en el número de goles encajados en varios encuentros demuestra que la fragilidad defensiva no es algo puntual, sino un aspecto a mejorar de manera estructural.
Lo más llamativo de la derrota contra el Atlético es que, desde la llegada de Almeyda al banquillo el pasado verano, esta ha sido la derrota más abultada por diferencia de goles. Hasta ahora, el equipo no había perdido por un margen de tres tantos, lo que acentúa aún más la preocupación. Esta estadística es un recordatorio de que, a pesar de los esfuerzos, hay aspectos de la plantilla que necesitan un ajuste inmediato para evitar que estas situaciones se repitan en el futuro.
La sequía goleadora: Un ataque ineficaz
Pero la preocupación no se limita solo a la defensa. El otro dato que ha dejado helados a los seguidores sevillistas tiene que ver con la capacidad ofensiva del equipo, o más bien, con la falta de ella. La derrota por 3-0 ante el Atlético de Madrid se hizo posible, en gran parte, porque el Sevilla fue incapaz de anotar un solo gol. Y este es un hecho inédito en lo que va de la temporada, la primera vez que el equipo se queda a cero en el marcador.
Este detalle es crucial porque una defensa sólida, aunque necesaria, no es suficiente si el ataque no genera peligro y no convierte las oportunidades. Un equipo que aspira a grandes cosas no puede darse el lujo de no ver portería en un partido, especialmente si al mismo tiempo recibe una goleada. Es una señal de que el equilibrio entre la defensa y el ataque no está funcionando como debería.
Es curioso recordar que el propio Matías Almeyda bromeó sobre esta estadística de la falta de gol el viernes previo al partido. Su comentario, «¿para qué lo decís?», entre risas, ahora adquiere un matiz diferente, casi premonitorio. La realidad de no anotar, sumada a la vulnerabilidad defensiva, pinta un panorama desafiante para el técnico y sus jugadores.
Un panorama que exige cambios
Actualmente, el Sevilla ostenta el desafortunado título de ser el segundo equipo que más goles encaja en la liga, con 19 tantos en contra hasta el momento. Esta cifra es un claro indicador de que algo no está funcionando en la zaga. La capacidad de un equipo para puntuar depende directamente de su solidez defensiva, y con estos registros, se hace extremadamente complicado sumar victorias y ascender en la tabla.
Matías Almeyda tiene un trabajo arduo por delante. Debe afinar la defensa, encontrar la manera de cerrar los espacios y eliminar los errores individuales que están costando tan caro. Pero también, y esto es igual de importante, necesita reactivar el ataque y asegurar que el equipo no vuelva a quedarse sin marcar. La afición de Vinyl Station Radio estará atenta a ver cómo el Sevilla logra superar estos desafíos y vuelve a encontrar el camino hacia la victoria, porque, al final del día, el fútbol es arte y emoción, y eso es lo que esperamos de nuestro equipo.
Fuente original de la información: ABC – Nacho Pérez
Créditos de la imagen: AFP