Nyom lo cuenta todo: Por qué el Getafe molesta tanto

En el vibrante mundo del fútbol, donde la pasión y el debate son el pan de cada día, pocas figuras son tan interesantes como Allan Roméo Nyom. A sus 37 años y medio, este futbolista de orígenes cameruneses y crianza parisina, ha vivido una trayectoria de película, labrándose un nombre en la élite tanto en España como en Inglaterra. Hoy, nos sumergimos en las reflexiones de Nyom, que nos revela los secretos detrás de su carrera, su filosofía de juego y, claro, por qué el Getafe de Bordalás se ha convertido en un auténtico dolor de cabeza para muchos.

Desde las calles de París hasta los estadios más importantes, Nyom ha recorrido un largo camino. Nos confiesa que sus padres, inmigrantes cameruneses, trabajaron incansablemente como taquilleros en el metro parisino, un esfuerzo que sentó las bases de su propia ética de trabajo. Como el menor de tres hermanos, recuerda cómo su hermana mayor, Michelle, asumió roles maternales, forjando un lazo familiar inquebrantable.

De las calles de París a la élite del fútbol

Una infancia ligada al balón y a la diversión

Nyom nos transporta a su infancia, una época donde los campos de fútbol improvisados eran su academia. “De calle, no como ahora, que los niños están más en academias”, afirma, recordando cómo, como la mayoría, empezó de delantero, persiguiendo la gloria del gol. Sin embargo, con el tiempo, su camino lo llevó a una posición más defensiva, donde encontró su verdadera vocación, sin olvidar nunca su pasión por marcar y asistir.

Su llegada a las categorías inferiores del Nancy a los 16 años no es algo común. Muchos considerarían que era tarde, pero para Nyom, era simplemente el momento adecuado. Su determinación y su sueño de ser futbolista le impulsaron a perseguir esta oportunidad sin dudarlo. Allí vivió una etapa dorada, mezclando estudios, fútbol de alta exigencia, diversión y muchas horas de PlayStation con compañeros de su edad, una experiencia que atesora como uno de los mejores recuerdos de su niñez.

El rigor francés y el carácter del futbolista

Su paso por el fútbol francés, especialmente en la academia del Nancy, fue fundamental para moldear al futbolista que es hoy. Nos cuenta que allí le «pusieron como una bestia» físicamente, con entrenamientos muy exigentes que le prepararon para los retos futuros. Y es precisamente ese rigor el que cimenta su reputación como futbolista «duro», una etiqueta que no le molesta en absoluto.

“No, es mi característica. Yo soy un futbolista duro, no sé qué hay de malo. De hecho, es muy bueno”, sentencia Nyom. Para él, aquellos que critican esta característica tienen una visión diferente del fútbol, más enfocada en el «tiki-taka», mientras que él ve un lado positivo y efectivo en la intensidad y la fuerza.

España: El amor en Granada y el reencuentro con Bordalás

La huella imborrable en Granada

Su llegada a España marcó un antes y un después en su carrera y en su vida personal. En Granada, Nyom se convirtió en un verdadero ídolo. Formó parte esencial de la generación que llevó al equipo desde Segunda B hasta Primera División en solo dos temporadas, rompiendo una sequía de 36 años. Aquellos seis años (2009-2015) en la ciudad nazarí están llenos de buenos recuerdos, equipos fuertes, un ambiente inmejorable y una afición entregada.

Además, fue en Granada donde encontró el amor, una relación que ya suma 15 años de felicidad. Nyom bromea sobre la famosa «malafollá» granadina, confirmando que su mujer la tiene muy intensa por las mañanas, pero asegurando que, en el fondo, los granadinos son «buena gente».

La Premier League y el impacto de Bordalás

Tras su exitoso paso por el Granada, Nyom se aventuró en la Premier League, jugando para el Watford y el WBA. Describe la liga inglesa como «intensa, fuerte» y con un poder económico que la convierte en una de las más potentes del mundo, una experiencia que lo enriqueció como futbolista.

Pero su regreso a España en 2019, especialmente su vínculo con el Getafe, ha sido un capítulo crucial, marcado por la figura de José Bordalás. Sus tres etapas en el club, todas bajo la dirección de Bordalás, han sido transformadoras. “Bordalás me ha hecho mejor futbolista a todos los niveles”, subraya Nyom, destacando la exigencia, el trabajo, el físico y la atención al cuidado personal que impone el técnico. “Cada entrenamiento es un trabajo de máxima tensión y todo el día piensas en fútbol”, añade.

El Getafe que «molesta»: Sin miedo a la intensidad

La filosofía Bordalás y las críticas sin fundamento

El Getafe de Bordalás se ha ganado una reputación, a veces controvertida, por su estilo de juego intenso y físico. Nyom no se calla al respecto: “Hay personas que ven el fútbol diferente y les molesta ver al Getafe lograr buenos resultados con un fútbol distinto al que a ellos les gusta. Yo creo que ha habido críticas que no han sido normales. Por eso decimos que el Getafe molesta.”

Está convencido de que muchos equipos desearían tener a Bordalás, una afirmación que resalta la admiración por la efectividad de su estilo. La primera etapa de Nyom en Getafe, en la temporada 2019-2020, antes de la pandemia, fue espectacular. El equipo rozó puestos de Champions, demostrando una superioridad que intimidaba a sus rivales.

“En varios partidos de esa temporada, los rivales no nos sostenían la mirada. Éramos un equipo casi imparable”, rememora Nyom. La clave era la intensidad y la fuerza, características que el Getafe explotaba al máximo en su estadio, el Coliseum. “Cuando venían al Coliseum, salíamos del vestuario, entrábamos en el túnel y ahí sentíamos el miedo que nos tenían. Ni nos miraban a la cara. Sabían que lo iban a pasar mal”, detalla, ofreciendo una visión única de la psicología en el fútbol al más alto nivel.

La «vida extra» del futbolista y la preparación del futuro

La carrera de Nyom ha tenido sus altibajos, incluyendo un periodo de desempleo tras su salida del Leganés. Con 36 años, llegó a pensar en la retirada, pero, una vez más, Bordalás apareció en su camino. “Bordalás me sacó del paro”, confiesa Nyom, quien ha vivido esta segunda y actual etapa con el Getafe como una “vida extra”, sabedor de que el final de su carrera como jugador está cerca.

El vértigo ante el después del fútbol es una realidad para muchos deportistas de élite, pero Nyom lo ha abordado con previsión. Lleva dos años preparándose para ser entrenador, con su licencia UEFA A ya en el bolsillo. Su visión del futuro también incluye una gestión económica inteligente. Consciente de que la carrera de un futbolista es finita, siempre ha buscado tener “las espaldas cubiertas”, pensando en su familia y en su bienestar a largo plazo, sin negar que, como todos, ha cometido errores, pero siempre buscando la mejor gestión posible.

Finalmente, nos habla de la selección de Camerún, con la que jugó el Mundial de Brasil 2014. A pesar de los desafíos actuales, Nyom mantiene un espíritu positivo y cree firmemente en el potencial de su país en la repesca, reconociendo la evolución de otras naciones africanas y el aumento del nivel competitivo.

La historia de Allan Nyom es un testimonio de resiliencia, trabajo duro y una filosofía de vida y fútbol inquebrantable. Su mirada honesta sobre el Getafe y su peculiar estilo nos permite entender mejor por qué, en el mundo del fútbol, ser diferente a veces es, simplemente, sinónimo de molestar.