¿Puede la música traer esperanza a un país en guerra? Descubre lo que están haciendo en Ucrania
¿Puede la música traer esperanza a un país en guerra? Descubre lo que están haciendo en Ucrania
El conflicto en Ucrania ha desbordado emociones y ha despojado a muchos de su sensación de bienestar. Sin embargo, en medio de la adversidad, la música se ha erigido como un símbolo de esperanza y unión. Ignacio García, un destacado director de escena, se prepara para ofrecer un concierto titulado ‘Fiesta’ el próximo miércoles en Kiev, donde la Banda Sinfónica Académica Nacional de Ucrania interpretará música española e hispanoamericana. A pesar de sus reservas iniciales sobre el uso de la palabra ‘fiesta’, los responsables de la Filarmónica Nacional Ucraniana le aseguraron que ese era precisamente el sentimiento que buscaban transmitir: luz y alegría en medio de la sombra del conflicto.
Un encuentro entre culturas
Cuatro días después de este evento, la música española volverá a resonar en Kiev. Esta vez, el joven director de orquesta donostiarra Félix Ardanaz llevará a escena la emblemática ópera ‘Carmen’, que, a pesar de ser francesa, tiene fuertes raíces en la cultura española. La actuación cuenta con la participación de la mezzo soprano Iryna Petrova y el tenor Oleg Zlakoman como protagonistas. Aún sin haber estado en Ucrania anteriormente, la oportunidad de dirigir este espectáculo es un momento que Félix valora enormemente.
Ignacio García, en contraste, ha visitado Ucrania ya nueve veces desde que comenzó la invasión rusa. Su experiencia más allá de ser un director de escena se ha enriquecido por el contacto constante con la comunidad musical local, donde muchos intérpretes han enfrentado situaciones desgastantes con admirable determinación. Según García, el compromiso y la capacidad de los músicos siguen intactos, a pesar de que muchos de ellos se encuentran en el frente: “Son grandísimos músicos, y sus plantillas han cambiado, incorporando a más mujeres”, asegura.
La música como refugio
El viaje a Kiev no está exento de complicaciones. Félix Ardanaz viajó, como muchos artistas, en tren desde Varsovia, junto a un grupo de colegas que comparten el mismo objetivo vital: llevar esperanza a un pueblo oprimido. Su primera experiencia en esta ciudad será única, pues se enfrenta a una realidad marcada por interrupciones de luz y alarmas de bombardeo. García comparte anécdotas sobre cómo, en momentos de oscuridad, los músicos utilizan las linternas de sus móviles para iluminar las partituras, creando una escena que refleja el compromiso inquebrantable con la música.
- “La música les permite olvidarse de las bombas durante unas horas”, dice Ignacio, resaltando el poder sanador del arte.
- “El sentimiento de soledad y desesperanza está presente en todos”, añade, haciendo hincapié en que la creación artística se ha convertido en una vía esencial para la supervivencia emocional.
Félix comparte que, aunque hay protocolos establecidos en caso de ataques, la adaptación a estas circunstancias se ha convertido en parte de la vida diaria: “Bajar al refugio en momentos de alarma es ya una rutina para los ucranianos”.
Reconocimiento a la cultura y su papel vital
Ambos, García y Ardanaz, coinciden en que la música no es solo un entretenimiento, sino algo que trasciende lo superficial. García destaca cómo la cultura desempeña un papel crucial en la salud mental del ser humano. En este contexto, la embajada de España en Kiev se ha involucrado activamente en este esfuerzo cultural, promoviendo obras significativas como el programa del 23 de abril en honor al Día del Idioma Español.
El repertorio incluirá desde pasodobles como ‘El gato montés’ y ‘Suspiros de España’, hasta clásicos de zarzuela que evocan una rica tradición musical. García menciona: “Es hermoso ver cómo los ucranianos se esfuerzan por crear belleza a pesar de las circunstancias”.
Para ambos artistas, el viaje es mucho más que un compromiso profesional; es una contribución significativa al alivio de un pueblo y una recordatorio de la resiliencia humana. “Sabemos que hay riesgos presentes, pero nuestra misión es sembrar un poco de alegría”, concluye García.
Fuente original de la información: ABC – Julio Bravo
Créditos de la imagen: Anatolii Fedortsiv / Bruno Mansone