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Zaporiyia: el giro inesperado que nadie vio venir

Zaporiyia: el giro inesperado que nadie vio venir Zaporiyia: el giro inesperado que nadie vio venir ¡Atención, melómanos y amantes de la cultura! Hoy en Vinyl S...






Zaporiyia: el giro inesperado que nadie vio venir

Zaporiyia: el giro inesperado que nadie vio venir

¡Atención, melómanos y amantes de la cultura! Hoy en Vinyl Station Radio nos adentramos en un giro noticioso que ha dejado a muchos con la boca abierta. La región de Zaporiyia ha sido protagonista de intensos movimientos y un desarrollo que, según algunos análisis, pocos previeron con esta magnitud. La confirmación de la retirada de las fuerzas defensoras de varias localidades clave ha marcado un antes y un después en esta compleja situación.

El portavoz de las Fuerzas de Defensa del Sur, Vladyslav Voloshyn, fue el encargado de anunciar esta semana que los soldados se han retirado de zonas como Novouspenivske, Nove, Ojótniche, Uspénivka y Novomikolaivka. Este movimiento no es aleatorio; es el resultado de un periodo de intensos combates que han sacudido la región durante días. Voloshyn destacó la ferocidad de la lucha en direcciones como Oleksandrivske y Hulyaipil, donde la presión ha sido constante e implacable.

Pero, ¿qué ha desatado este inesperado desarrollo? Los especialistas ucranianos del grupo Deep State, conocidos por su meticuloso análisis de los movimientos en el frente, ya habían advertido la semana pasada sobre un aumento significativo de la presencia de las fuerzas invasoras, que habían logrado expandir lo que se conoce como la «zona gris». Este incremento de la actividad ha derivado en más de 100 enfrentamientos militares solo en las últimas jornadas, una cifra que habla por sí sola de la magnitud de la contienda.

Las tácticas empleadas por las fuerzas del Kremlin son diversas y contundentes. Voloshyn subrayó que están utilizando «todo tipo de armas disponibles» con un único fin: expulsar a las fuerzas defensoras de sus posiciones. Esto se traduce en un recrudecimiento del fuego de artillería, con más de 400 ataques diarios, sumado a operaciones de asalto e infiltración. La perspectiva en esta área, que forma parte de un frente que se extiende por más de 1.000 kilómetros, se presenta cada vez más sombría.

La voz de la preocupación

El impacto de estos acontecimientos no ha pasado desapercibido. Analistas y expertos han manifestado su inquietud. Tatarigami, un exoficial del Ejército de Kiev, compartió en sus redes sociales su preocupación por el rumbo de los combates. Su mensaje es claro: si las fuerzas ucranianas continúan estancadas en otras zonas estratégicas como Pokrovsk y Kupyansk, esto podría abrir la puerta a un avance más rápido del adversario en Zaporiyia. Es un efecto dominó que tiene a muchos en vilo.

Tras las declaraciones de Voloshyn, que en cierto modo confirmaron las evaluaciones de Deep State, las reacciones no se hicieron esperar. Algunas voces en Ucrania expresaron una profunda frustración. Serhii Sternenko, un voluntario, articuló un sentimiento generalizado de hartazgo y decepción, señalando una combinación de factores que, a su juicio, han contribuido a esta situación. Él mencionó la «destrucción gradual del control de las tropas, el agotamiento de las fuerzas y las mentiras generalizadas», elementos que, unidos a la intensa presión enemiga, han desembocado en estos «inevitables avances». Su visión pinta un cuadro complejo y lleno de desafíos para las fuerzas defensoras.

Pokrovsk: El epicentro de una lucha sin tregua

Mientras tanto, la ciudad estratégica de Pokrovsk, situada al sur de la región de Donetsk, sigue siendo el escenario de algunos de los combates más encarnizados. A pesar de los anuncios de su toma por parte de líderes adversarios la semana pasada, las fuerzas ucranianas continúan activas en la urbe. Los mandos militares de Kiev han desmentido que haya un cerco total en Pokrovsk o en la cercana Myrnogra, pero la complejidad de la situación es innegable. Las noticias que nos llegan de este punto geográfico son de una tensión palpable.

Oleksander Sirski, el comandante en jefe del Ejército de Kiev, ha calificado la operación desplegada como una «ofensiva estratégica» a gran escala, destinada a romper las líneas defensivas. Alrededor de Pokrovsk se ha detectado una concentración masiva de tropas, con unas 150.000 fuerzas de las 700.000 desplegadas en todo el frente. El objetivo es claro: forzar la caída de toda la región de Donetsk, una zona que lleva parcialmente bajo control de las fuerzas rusas desde 2014. Sirski, en declaraciones a un medio internacional, describió un panorama de «batallas y combates constantes», donde el enemigo realiza maniobras rápidas y constantes para desestabilizar las defensas.

La presencia de hasta 300 soldados del Kremlin dentro de Pokrovsk fue confirmada por el 7.º Cuerpo de Paracaidistas de Ucrania. Esta ciudad minera, que antes del conflicto albergaba a más de 70.000 personas, ha padecido un asedio constante durante más de un año. Su ubicación al sur de Donetsk la convierte en un nodo logístico vital para los militares ucranianos y una barrera crucial para contener posibles avances hacia el oeste. La batalla por Pokrovsk es, en muchos sentidos, un microcosmos de la lucha más amplia, con enormes implicaciones estratégicas y humanas. La resistencia y los giros inesperados nos recuerdan lo dinámico y, a menudo, impredecible que puede ser este conflicto.

Fuente original de la información: ABC – Miriam González

Créditos de la imagen: REUTERS

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