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El contratiempo que pone en jaque a la campeona de Europa

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El contratiempo que pone en jaque a la campeona de Europa

El contratiempo que pone en jaque a la campeona de Europa

La cuenta atrás para el Eurobasket 2025 ha comenzado, y con ella, la ilusión de toda una afición que espera ver a la selección española defender su corona. Sin embargo, cuando todavía falta más de un mes para que el balón eche a rodar, una noticia ha caído como un jarro de agua fría en el seno de «La Familia»: Lorenzo Brown, uno de los héroes inesperados del último oro continental, no estará en la cita. Un golpe duro y directo a la línea de flotación del equipo dirigido por Sergio Scariolo.

La Federación Española de Baloncesto confirmaba la noticia que nadie quería escuchar: el base estadounidense, nacionalizado para la gesta de 2022, ha comunicado su baja por motivos personales. Su ausencia deja un vacío enorme, no solo en la pista, sino también en el recuerdo de aquella hazaña memorable que llevó a España a lo más alto contra todo pronóstico.

Un Héroe Inesperado que Dice Adiós

Para entender la magnitud de esta baja, es fundamental rebobinar hasta el Eurobasket de hace tres años. La selección llegaba al torneo en plena transición, con bajas sensibles y sin el cartel de favorita que la había acompañado durante más de una década. Fue entonces cuando emergió la figura de Lorenzo Brown. Su nacionalización exprés generó debate, pero todas las dudas se disiparon en cuanto pisó el parqué.

Brown no solo se adaptó al sistema de Scariolo, sino que lo lideró con una maestría asombrosa. Se convirtió en el director de orquesta, el anotador decisivo y el faro que guio al equipo en los momentos más calientes. Sus actuaciones en las eliminatorias, especialmente en la semifinal contra la anfitriona Alemania y en la gran final, son ya historia del baloncesto español. Fue el MVP silencioso, el fichaje estelar que nadie esperaba y que resultó ser la pieza clave para conquistar un oro que parecía imposible. Por eso, su ausencia ahora duele el doble. Se va el hombre que demostró que el compromiso no entiende de pasaportes, sino de corazón.

El Complejo Puzle de Scariolo

Con la baja de Brown, el seleccionador Sergio Scariolo se enfrenta a un desafío mayúsculo. El técnico italiano, un maestro en la construcción de equipos competitivos a partir de la suma de talentos, debe ahora reconfigurar por completo la dirección del juego. En su lista inicial para la preparación del torneo, Brown era el pilar sobre el que se construiría el ataque. Ahora, ese pilar se ha desvanecido.

La responsabilidad recae de forma casi exclusiva en Alberto Díaz, el único base con una experiencia consolidada en el equipo nacional. El jugador malagueño, conocido por su increíble intensidad defensiva y su carácter de líder, tendrá que dar un paso al frente también en la organización. Él fue otro de los héroes de 2022, un perro de presa que secó a las estrellas rivales. Ahora, además de su garra, España necesitará su clarividencia y su temple para manejar el ritmo del partido.

Pero Díaz no estará solo. La necesidad abre la puerta a la nueva generación, y aquí es donde la apuesta se vuelve tan arriesgada como emocionante. Scariolo deberá confiar en la juventud para suplir una baja de tanto calibre. La situación de la dirección del equipo queda así:

  • Alberto Díaz: El veterano, el ancla defensiva y el corazón del equipo. Ahora, con galones de director titular.
  • Juan Núñez: Con solo 19 años, es una de las mayores promesas del baloncesto europeo. Su descaro y talento para el pase serán fundamentales.
  • Mario Saint-Supery: El sustituto oficial de Brown en la convocatoria. Otra joya de 19 años, malagueño como Díaz, que recibe la llamada como una oportunidad única para demostrar su valía en la élite.

La Juventud al Poder: Una Apuesta de Riesgo y Futuro

La baja de Lorenzo Brown, recientemente fichado por el prestigioso Armani Milán, obliga a España a acelerar su propio relevo generacional. Jugadores como Juan Núñez y ahora Mario Saint-Supery se encuentran ante una prueba de fuego. Ya no son solo promesas para el futuro; el presente les exige dar un rendimiento inmediato en el escenario más competitivo.

Esta situación pone a prueba, una vez más, la legendaria capacidad del baloncesto español para reinventarse. «La Familia» ha hecho de la unidad y la inteligencia colectiva su seña de identidad, superando a rivales con más talento individual a base de trabajo en equipo. Ese espíritu será más necesario que nunca. ¿Podrá la España de Scariolo sobreponerse a este contratiempo? ¿Será la osadía de los jóvenes suficiente para suplir la magia del héroe ausente? El desafío es enorme, pero si algo ha demostrado este equipo es que nunca se rinde. La defensa del trono europeo acaba de volverse mucho más difícil, pero también mucho más épica.

Fuente original de la información: ABC –

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