El legado que deja el autor de I fought the law

El legado que deja el autor de I fought the law
El mundo de la música ha perdido a una de sus figuras más emblemáticas y prolíficas: Sonny Curtis. Conocido por ser parte de The Crickets, la banda que acompañó al legendario Buddy Holly, y por ser la mente maestra detrás de himnos como «I fought the law» y el tema principal de «The Mary Tyler Moore Show», Curtis nos dejó a los 88 años. Su hija, Sarah, compartió la triste noticia en redes sociales, conmoviéndonos a todos con sus palabras sobre un hombre que vivió una vida extraordinaria y dejó una huella imborrable en el corazón de quienes le conocieron.
La noticia de su partida, tras una enfermedad repentina, ha resonado profundamente en la comunidad musical. Sarah, en su emotivo mensaje, expresó la gratitud de haber estado junto a su padre y madre en sus últimos momentos, destacando la tranquilidad con la que se despidió. Tenía 88 años y, como bien señaló su hija, «dejó huella en este mundo y en los corazones de todos los que lo conocieron». Un día de tristeza, sin duda, pero también un recordatorio de una vida vibrante que merece ser celebrada con alegría, tal como él lo hubiera deseado.
Los Primeros Acordes de una Leyenda
Nacido en Meadow, Texas, en 1937, Sonny Curtis llevaba la música en la sangre. Proveniente de una familia de músicos, sus tíos formaban parte de una banda de bluegrass llamada The Mayfield Brothers, lo que sin duda encendió su pasión desde joven. Su camino se cruzó con el de Buddy Holly a mediados de la década de 1950, incluso antes de la formación oficial de The Crickets en 1957, banda a la que se unió poco después. Sin embargo, su trayectoria no fue lineal; hubo un breve periodo en el que se aventuró en una gira con Slim Whitman, mostrando la versatilidad y la demanda de su talento.
Regresó con Holly a finales de 1958, tan solo unos meses antes del fatídico accidente aéreo de febrero de 1959 que cobró la vida de Buddy Holly. A pesar de esta tragedia, Curtis se mantuvo firme con The Crickets, asumiendo el rol de guitarrista principal y, con el tiempo, también la voz principal de la banda. Esta etapa fue crucial para mantener vivo el espíritu y la música de una de las bandas más influyentes de la historia del rock and roll. Su permanencia no solo mantuvo a flote el legado de The Crickets, sino que también solidificó su propio estatus como un músico y compositor esencial.
«I Fought the Law»: Un Himno de Generaciones
Fue en 1960 cuando Sonny Curtis regaló al mundo una de sus composiciones más icónicas y duraderas: «I fought the law». Esta canción, que encapsula el espíritu rebelde del rock, se popularizó enormemente gracias a la versión de Bobby Fuller Four, escalando posiciones en el Top 10. Pero su inmortalización llegó de la mano de The Clash, quienes la transformaron en un himno punk rock en 1979, catapultándola a la estratosfera de la cultura pop y asegurándole un lugar privilegiado en la historia musical.
La influencia de «I fought the law» es innegable. Ha sido incluida en la prestigiosa lista de las 500 mejores canciones de todos los tiempos de la revista Rolling Stone, un testamento a su impacto y trascendencia. La cantidad de artistas que han versionado este tema es impresionante, abarcando géneros y generaciones:
- Dead Kennedys
- Bob Rivers
- Green Day
- Grateful Dead
- Johnny Cash
- Nanci Griffith
- Bruce Springsteen
- Tom Petty
- Status Quo
Cada versión ha aportado una nueva capa a la canción, demostrando su capacidad para resonar con diferentes públicos y en distintas épocas. Es una composición que, a pesar de su sencillez aparente, posee una profundidad temática y una energía que la hacen eternamente relevante.
Más Allá de «I Fought the Law»: Un Genio Compositor
La habilidad compositiva de Sonny Curtis no se limitó a un solo éxito. Su pluma prodigiosa dio vida a numerosos temas que se convirtieron en éxitos para otros gigantes de la música. Compuso singles para los Everly Brothers, destacando «Walk», escrito durante su reclutamiento en el ejército en 1959. Pero la lista de artistas que se beneficiaron de su talento es extensa y ecléctica:
- Leo Sayer con «More Than I Can Say»
- Keith Whitley con «I’m No Stranger to the Rain»
- Glen Campbell con «The Straight Life»
Sin embargo, fue su tema «Love Is All Around» de 1970 el que le brindó otro pico de popularidad masiva, al convertirse en la icónica banda sonora de la serie televisiva «The Mary Tyler Moore Show». La historia de cómo esta canción llegó a ser el tema principal es fascinante y habla de la serendipia y el talento. Un amigo, Doug Gilmore, manager de la industria musical, le encargó la tarea al saber que los creadores de la serie buscaban una canción para la cabecera. Curtis no dudó en aceptar y, tras recibir un guion de cuatro páginas, se reunió con James L. Brooks, cocreador de la serie y futuro cineasta galardonado con un Óscar.
Curtis recordaba el encuentro con Brooks como algo inicialmente frío e inusual. Brooks, en una sala vacía con solo un teléfono en el suelo, le dijo que «aún no estaban en la fase de elegir una canción, pero la escucharía de todos modos». Con solo su guitarra, Curtis interpretó la melodía, y la reacción fue inmediata y eufórica. Brooks, al escuchar la canción, comenzó a llamar a gente, la sala se llenó y pronto una grabadora estaba registrando la magia. Fue un momento que cambió el curso de la televisión y la música popular, ligando para siempre la voz y la melodía de Curtis a la popularidad de una de las series más queridas de la historia.
Una Trayectoria en Solitario y Reconocimientos
Además de su trabajo con The Crickets y sus innumerables composiciones para otros artistas, Sonny Curtis labró una exitosa carrera en solitario, lanzando álbumes como «Sonny Curtis» y «Spectrum». Su incursión en el género country también fue aplaudida, alcanzando el Top 20 de las listas country con el sencillo «Good Ol’ Girls» en 1981.
En sus últimos años, continuó tocando con los miembros de The Crickets, una muestra de su lealtad y amor por la música. La banda lanzó álbumes como «The Crickets and Their Buddies», que contó con la colaboración de grandes nombres como Eric Clapton, Graham Nash y Phil Everly. Una de sus canciones más destacadas de este periodo fue «The Real Buddy Holly Story», una crítica a la película biográfica de 1978 sobre Buddy Holly, protagonizada por Gary Busey, demostrando que Curtis no solo era un músico, sino también un pensador con voz propia.
Su impacto en la música fue finalmente reconocido en vida con múltiples homenajes. En 2012, Sonny Curtis fue inducido en el Salón de la Fama del Rock and Roll junto a otros miembros de The Crickets, honrados como «el modelo de las bandas de rock and roll que inspiró a miles de jóvenes a formar grupos de garaje en todo el mundo». Residiendo en Nashville durante la segunda mitad de su vida, también fue incluido en el Salón de la Fama de los Compositores de la ciudad en 1991 y en el Salón de la Fama y Museo de los Músicos en 2007. Kyle Young, director ejecutivo del Salón de la Fama y Museo de la Música Country, lo describió acertadamente como «un hombre amable y humilde que compuso canciones extraordinarias». Su legado es un testamento a una vida dedicada a la música, a la creación y a la inspiración, una que Vinyl Station Radio celebra con gran admiración.
Fuente original de la información: ABC – Nacho Serrano
Créditos de la imagen: facebook