La travesía a Es Vedrà que pone al límite a once veleros

La travesía a Es Vedrà que pone al límite a once veleros
El mar Mediterráneo se ha convertido en el escenario de una batalla épica de estrategia, resistencia y pasión por la vela. El Real Club Náutico de Valencia (RCNV) ha dado el pistoletazo de salida a uno de los eventos más esperados del calendario náutico: el XXVI Trofeo SM la Reina. Y lo ha hecho por todo lo alto, con una prueba que es pura adrenalina y que separa a los marineros de los verdaderos lobos de mar.
Desde el pasado viernes, la intensidad se respira en el ambiente. El campo de regatas Manel Casanova fue el punto de partida de una aventura que llevará a once embarcaciones a navegar sin descanso durante más de un día. Hablamos de la prueba de altura ORC A2, un desafío que forma parte de la prestigiosa XXXVII Copa Almirante Marcial Sánchez-Barcaíztegui y que promete emociones fuertes desde la primera hasta la última milla.
Un recorrido que desafía la resistencia y la táctica
La competición no es un simple paseo por la costa. Se trata de un recorrido exigente de 161 millas náuticas que pone a prueba los límites de las tripulaciones. La flota partió de Valencia con un objetivo claro: poner rumbo al pequeño y escarpado archipiélago de las Bledas, cerca de la costa ibicenca. Una vez allí, deberán dejar estas islas por estribor para luego enfrentarse al tramo más icónico de la travesía: rodear el enigmático y magnético islote de Es Vedrà.
Este gigante de piedra, cargado de leyendas y misticismo, no solo es un punto de viraje en el mapa, sino también un desafío psicológico y técnico para los navegantes. Tras superar Es Vedrà, las embarcaciones emprenderán el largo viaje de regreso a Valencia, donde se espera que los primeros barcos comiencen a llegar a lo largo del sábado, aunque los más rezagados podrían hacerlo incluso el domingo, dependiendo de los vientos y las corrientes que encuentren en su camino.
Los once valientes que surcan el Mediterráneo
Once equipos han aceptado el reto, cada uno con la esperanza de inscribir su nombre en la historia de esta regata. La salida se dio con unas condiciones de viento ideales, un Levante estable de entre 7 y 8 nudos que impulsó a los veleros hacia mar abierto. Estos son los protagonistas de la odisea:
- Reti, patroneado por Xavier Santamaría.
- M10 ZAS C&R, de los hermanos Francés.
- Tortooga, con Rafa Ruiz al timón.
- O’Marylou, de Jesús de Miguel.
- Jambo Mar sin plástico, liderado por Julio Sánchez.
- Va de bo, de Joaquín Pérez.
- Vikingo, de Antonio Picot.
- Entropía No, con Pablo Aleixandre.
- Croswind, de Vicente Iranzo.
- Pampero of Down, de Rodrigo Quesada.
- OUI, comandado por Toni Garcés.
Más que una regata, una prueba de fuego
Pedro Quiroga, el director deportivo del RCNV, lo tiene claro. Esta no es una competición cualquiera. «Este tipo de regata forma parte del Circuito Mediterráneo. Ya la ha hecho el PalmaVela y el Godó, y ahora la última prueba es en la Reina», explica. Esto sitúa al Trofeo SM la Reina en la élite de la vela de crucero, compartiendo prestigio con otros grandes eventos del calendario.
Quiroga describe la naturaleza de la prueba con palabras que transmiten la dureza del reto: «Es un tipo de regata más intrépida, más en guardia, no descansas, dura muchas horas…». Es una maratón sobre el agua donde la concentración, la compenetración de la tripulación y la capacidad para tomar decisiones rápidas son tan importantes como la velocidad del barco. La fatiga es el principal enemigo, y solo los equipos mejor preparados física y mentalmente lograrán mantener el ritmo hasta el final.
Pero esta travesía oceánica es solo el aperitivo. Mientras estos once veleros luchan contra las olas, en el Real Club Náutico de Valencia ya se preparan para el plato fuerte. A partir del lunes, el club será un hervidero de actividad para recibir al resto de la flota que competirá en las pruebas Inshore, que se celebrarán del 4 al 6 de julio. El ambiente se transforma, la emoción crece y Valencia se reafirma como una de las grandes capitales de la vela en el Mediterráneo. Por ahora, todas las miradas están puestas en el horizonte, esperando ver aparecer las velas de los héroes que se atrevieron a desafiar al mar en su viaje a Es Vedrà.
Fuente original de la información: ABC –
Créditos de la imagen: pep portas/rcnv